El viaje de Alberto Fernández a México es una clara señal de la expectativa que genera en el futuro gobierno el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador. Muchos creen que el mandatario mexicano podrÃa convertirse, por afinidad ideológica, en una suerte de referente de un bloque regional que defienda intereses comunes. El tamaño de su economÃa, desde luego, es otro aspecto atractivo.
Fernández viajó a la Ciudad de México acompañado con Felipe Solá, acaso una concesión cada vez más robusta a los rumores que lo marcan como el futuro canciller. La llamada de urgencia a MatÃas Kulfas, para encarar las primeras conversaciones comerciales con las autoridades mexicanas, también instalaron la idea de que el ex gerente del Banco Central podrÃa ser ministro de Producción y no de Hacienda.
Inflación y restricción cambiaria, en la agenda de empresarios mexicanos que verán a Alberto
Con la idea de afianzar la relación, en el equipo de Alberto Fernández ya empezaron a sonar algunos nombres para la Embajada. La primera que se anotó fue Alicia Castro, un perfil que no termina de convencer por su extrema defensa al chavismo, justo una asociación que intentó la oposición mexicana para deslegitimar a AMLO.
Otros dos nombres cobraron relevancia en las últimas semanas. Juan Manuel Abal Medina y Nilda Garré. Detrás de estas proto-propuestas figura el padre del ex Jefe de Gabinete de Cristina Kirchner. Durante su exilio en México, se convirtió en una persona de confianza de Carlos Slim, con quien Alberto tendrá una reunión a solas el próximo lunes.
El padre de Abel Medida es el histórico ex secretario General del PJ de los setenta, en ese momento cercano a Perón. Luego en el exilio en México colaboró con los servicios de inteligencia de ese paÃs y de Cuba, donde mantiene buenos contactos. Esos vÃnculos le sirvieron para tejer buenas relaciones con Slim y otro millonario argentino, el dueño de laboratorios Hugo Sigman.
"Los puede ayudar a penetrar rápido en el cÃrculo rojo de allá", se entusiasmaron algunos albertistas, al pensar en nombrar a su hijo como embajador. El problema de Abal Medina es el veto que pesa desde La Cámpora y de la propia Cristina Kirchner. No le perdonan sus comprometedoras declaraciones en la causa de los cuadernos.
El malestar con Abal Medina caló tan profundo que incluso le negaron el acceso al palco de un acto de campaña. Unas semanas después lo dejaron subir. "Pero que se pare bien en la esquina, en un costadito", le advirtieron.
En las últimas horas, y en medio de la gira de Alberto por el paÃs azteca, el nombre de Carlos Tomada comenzó a tomar fuerza. Se trata de un hombre que fue tejiendo lazos con otros lÃderes regionales en el seno del Grupo de Puebla, donde convergen "más de 30 lÃderes regionales progresistas".
Tomada fue ministro de Trabajo de Néstor Kirchner y Cristina, compartió gabinete con Alberto y durante los cuatro años del macrismo desempeñó un rol medido como legislador del peronismo porteño, el mismo espacio polÃtico del que nació el presidente electo.
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- 405/11/1918:40El mejor ministro de trabajo de todos los tiempos debería ir de embajador a la OIT,
- 304/11/1915:23jajajajaja, para rascarse las bolas mejor mandenlo de Embajador de Brasil a este gran abogado laboralista
- 204/11/1907:44Caló. Quiere seguir poniendo embajadores en México, estos 4 años puso al impresentable del embajador macrista sabor.
- 103/11/1914:22Tomada fue el mejor ministro d Trabajo d la historia, aseguro q en toda la era K las paritarias superaran ampliamente a la inflacion (ergo: incremento el poder d compra d salarios) y puso en marcha los repro (en momentos q la crisis internacional 2008 q desato una recesion global) q aseguro q no se perdieran puestos d trabajo, se crearon 6 millones puestos d trabajo y los planes se desplomaron d 1,5 millon q dejo Duhalde a 200.000 en diciembre 2015. Sin lugar a dudas el lugar d Tomada no es Mexico, el lugar d Tomada es el ministerio d Trabajo.